lunes, 31 de octubre de 2011

Preguntas sin respuesta



El día que me muera

dejaré de cumplir años
fin del trayecto.

Se acabó la fiesta.

Ya pasó todo
Ya se acabó
el dolor
las preguntas
la enfermedad
el dolor
la soledad
el olvido.

Fin de todo,
y volveré a nacer
de otra manera.

Como cristal, como hoja, como lirio o como vendaval
no importa cómo
pero no escogeré nada en lo que me vuelvan a preguntar tantas cosas que luego puedan volverse contra mi.

Ni mi carnet de identidad
ni mis hijos, ni mis novios, ni mis vestidos, ni mi cuenta corriente
ni nada de mi vida.

Tal vez no vuelva nunca
a encerrarme en un cuerpo que me tiene presa
y no se nada.
En el que solo puedo mirar por cinco ventanas
cinco.
Cinco dedos en mi mano derecha
cinco en mi izquierda
dos ojos para ver
dos pies para caminar
siendo tan grande el mundo
y tan torpes nosotros que pensamos que lo sabemos todo.

Más libre que el viento volveré a nacer yo
si es que nazco.
O tengo ganas de nacer.

¿Naceremos a la fuerza?
¿Alguien cogerá nuestro yo y lo encerrará en un cuerpo?
¿Será nacer igual que morir?

martes, 25 de octubre de 2011

Indignada





Adónde están aquellos que dieron lugar a los mendigos
quienes
los que dejaron sin trabajo a los padres de los niños.


Que los acechen las iguanas y las aves rapaces
y no les dejen respirar .


Quienes los que intentaron poseer el mundo con dinero falso 
y nos mintieron
quienes
los que llevaron el mundo a la ruina.


Que la lluvia los barra y la tragona se los lleve 
al desierto 
de los nunca jamás


Quienes hipotecaron a la Madre Grecia
aquellos que la vejaron y humillaron mintiéndole
maquillando las deudas que ellos mismos procuraron
buscando beneficios.


Que los vientos les soplen en su contra
y los siglos les confundan la mirada.


Donde está la justicia 
que apartó al juez más sabio de la auténtica Justicia
(la Justicia entregada y generosa
del hombre honrado que creció entre los montes)
para que los corruptos pudieran campar a sus anchas 
por los recovecos oscuros del poder.


Adónde están los verdaderos jueces
para que los altos delincuentes salgan esposados


Adónde los políticos que no se preocuparon 
de evitar tamaña felonía
ni uno solo en el mundo supo hacer los deberes
qué bajeza de miras
no pensar en el pueblo al que dicen servir.


Y qué haremos ahora que los ciegos administran la vida y el sudor 
de los hombres honestos.